Crecí en los 70 y los 80 y en aquel entonces las marcas blancas no
existían. En casa usábamos Mistol,
Colón, Mimosín, tomábamos Nesquik o Colacao y nos duchábamos con Magno, LaToja, Heno de Pravia, etc. Y esos aromas
siempre me traen a la infancia, sobre todo los de higiene personal. Por eso me lavo las manos con jabocitos de la Toja, o
de Heno de Pravia, simplemente por la sensación tan agradable que me traen.
Y es que cierto que hay un montón de bodymilks y desodorantes que huelen deliciosamente, pero cuando te duchas con geles de olor tan espectacular como Heno de Pravia, Magno, La Toja... y te aplicas otro producto, la magia de ese aroma tan rico desaperece o pierde su espíritu al mezclarse con la otra.
Pero de todos aquellos aromas, el
que con más ternura recuerdo es el de Moussel.
Afortunadamente hoy en día casi todas las marcas blancas tienen imitación
de este delicioso gel que tanto nos gustaba, pero aunque se parecen mucho, nunca
son exactamente iguales.
El caso es que un día en una
incursión a Druni ví que habían sacado una colonia de Moussel que venden tanto
suelta como en un pack junto con el gel, y me resistí a la tentación. Pero cuando volvi más recientemente... no
pude evitar meterla en la cestita que te dan al entrar.
He de decir que huele bien, y que
se parece mucho a la olor que deja el gel pero echo de menos que sea más
persistente, me quedo con ganas de que me dure más, al fin y al cabo es el olor
que hago recién salida de la ducha y poder oler así durante más rato.
La botella es muy bonita, es
redonda, imitando la forma de toda la vida y una de las señas de identidad de
esta marca. Y tiene lunarcitos, que le
dan un aire más vintage.
Yo cuando ví que el envase era de
cristal y todo eso, pensé que se iba a tratar de una eau de cologne más
duradera, pero sinceramente creo que deberían comercializarla como el resto de
colonias a granel, como la de Heno de Pravia, Lavanda de Gal, o de Nenuco, que por el tapón que tiene te
puedes rellenar tus propios sprays y llevarlas en el bolso para ponerte cuando
quieras. Porque me encantaría poder meterme en el bolso un spray chiquitito con
un poco de colonia Moussel y echarme por ejemplo, a mitad de mañana para
refrescarme. Ahora mismo lo tengo en la mesa de la oficina en la que voy a estar trabajando un tiempecito y durante la mañana me echo varias veces, sin pasarme. Me hace funcionar mejor el hecho de sentir un olor agradable mientras trabajo, y para esto sí qeu viene bien.
Otra cosa que tampoco me gusta es
que no se trata de un envase especialmente cómodo a la hora de hacer uso del
mismo. Mi mano no es ni muy grande ni
muy pequeña y cuando cojo la botella para perfumarme, tengo la sensación de que
en cualquier momento se me puede resbalar y caer al suelo. Ójala mejoren el envase.
Pues nada, queridas, esta es mi
opinión sobre la fragancia Moussel. Lo
dicho, si os gusta el olor, os gustará la colonia... pero no durará mucho en
vuestro cuerpo.
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